Ausländer – Los Superdemokraticos http://superdemokraticos.com Mon, 03 Sep 2018 09:57:01 +0000 es-ES hourly 1 https://wordpress.org/?v=4.9.8 Con nuestro hocico berlinés… http://superdemokraticos.com/es/laender/deutschland/mit-unserer-berliner-schnauze/ http://superdemokraticos.com/es/laender/deutschland/mit-unserer-berliner-schnauze/#comments Thu, 01 Sep 2011 07:03:33 +0000 http://superdemokraticos.com/?p=5023 Empiezo esta editorial con una sensación en el cuerpo de salir a pasear por un campo de minas. No es que no pueda definir exactamente cuál es la imagen más común que se tiene de lo alemán en el espacio hispanoamericano, quizá a nivel mundial. Todo lo contrario, llevo 14 años respondiendo a las mismas preguntas. Si todo es tan frío como se piensa, tan estricto, tan racista, si el idioma es impronunciable, si los alemanes carecen por completo de sentido del humor y ¿por qué me hago esto? ¿Por qué me quedo? ¿por qué vivo aquí?

La representación de Alemania en el mundo, por lo menos para mi generación no está a cargo de los alemanes, sino más bien a cargo de los americanos. De ahí que probablemente lo primero que escuche un alemán como saludo en mi país sea un: “Heil Hitler”. Eso tiene que ver con el completo desconocimiento de la historia y con las películas de Hollywood, que son las que siguen reproduciendo el cliché. En mi caso el poder defenderme en un idioma tan enrevesado es visto como un mérito, ya que salvo por los estudiantes de filosofía en la mayoría de los países occidentales, el alemán hace mucho que no es un idioma universal.

La sociedad alemana no tiene fama de ser amigable ni si quiera en Europa. De ahí que con el estrechamiento de los vínculos dentro de la Comunidad Europea, el inglés sea el que se imponga lentamente entre la gente joven, también en las calles de Berlín. A nadie puede extrañarle el fracaso estrepitoso de la “Blue Card”, la versión limitada y burocrática de la Green Card americana, con la que los alemanes intentaron durante un tiempo “mejorar” el perfil de los migrantes que llegan a la República Federal Alemana.

Aquí la gran parte de la sociedad espera discursivamente que sus inmigrantes se integren, pero la mayoría de los programas orientados en ese sentido tropiezan con ese sentimiento de superioridad autárquico, que impide de entrada cualquier acercamiento productivo. Los cursos de idioma que ofrece el gobierno son el ejemplo más ilustrativo. No están pensados para satisfacer la curiosidad de los que vienen aquí por interés de conocer la cultura. Es como si a los alemanes les resultara inconcebible que alguien en su sano juicio tomara la decisión de aprender, de conocer mejor el país. La integración laboral está diseñada para introducir a los inmigrantes en la cadena de servicios, no para aceptarlos como sujetos. Es como si el gobierno o la propia sociedad no fuera capaz de reconocer y aceptar el intelecto del recién llegado y eso, a pesar de que nuestra generación, aquí también está abierta al mundo. Los gobernantes no nos representan.

De ahí que la imagen que desde Los Superdemokraticos queremos mostrar de Alemania sea completamente distinta a los clichés clásicos que persiguen a este país y a sus traumas. Los Superdemokraticos es una prueba más, como Deutsch Plus o Neue Deutsche Medienmacher, de que Thilo Sarrazin y muchos otros políticos populistas como él, se equivocan cuando intentan convencernos de que la integración ha fracasado o que la idiosincrasia alemana es inconmovible. Si eso fuera así Kreuzberg no existiría y existe, nuestra sociedad alternativa alemana es rica en experiencias, en facetas, en acentos y de una calidez humana que sorprendería a cualquiera. En nuestro contexto sólo existen ciudadanos que construyen en común una sociedad nueva, donde reír es parte del día a día y el alemán es nuestra lengua franca.

En septiembre, mes de elecciones en Berlín, nuestros autores reflexionarán sobre distintos aspectos de lo alemán y la imagen que tiene este país. Con eso queremos colaborar a que se disipen malos entendidos. La “Berliner Republik” que nosotros representamos es joven, cosmopolita y abierta al mundo. El alemán que nosotros hablamos es inteligente y divertido, aunque no siempre sea gramaticalmente perfecto y se merece gobernantes más despiertos, que estén en condiciones de entenderla. Nuestro hocico berlinés no piensa callarse…

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Una inyección de capital http://superdemokraticos.com/es/editorial/eine-finanzspritze/ Sun, 03 Oct 2010 13:50:41 +0000 http://superdemokraticos.com/?p=2500

Oscar Seco, Apocalipse & Alternative Worlds, 2001


„Nuestros problemas son los mismos que se respiran en las calles de Milán, de Berlín o de Nueva York“ es una frase del último artículo de Javier Badani, desde La Paz, que viene muy bien al día de hoy: 3 de Octubre.
Día en el que se festeja la Reunificación Alemana. Confieso que me da pudor tocar el tema. Soy extranjera y mi relación con la reunificación ha ido evolucionando con los años, por eso hablo en primera persona. Vivo hace trece años en Berlín o en sus alrededores y cuando llegué en 1997 a la ciudad de Potsdam, el proseceso de unirse no había terminado de consolidarse, si lo ha hecho, si lo hará algún día: ¿qué es una nación?

La recuperación de la memoria histórica es tal vez una de las características comunes de toda nuestra generación y al respecto, no hay otra ciudad como esta. Berlín es la capital para los chicos de la transición de occidente. Para los hijos mimados del vacío existente, desde la ruptura física del pensamiento binario. Desde el cese de La Guerra Fría. Esta ciudad está llena de monumentos autoreferenciales.  Como si el significado alegórico de la caída del Muro de Berlín no hubiera estado acompañando por la „marcha por la vida“ de los mineros bolivianos, por la caída del último dinosaurio Pinochet, por la llegada triunfal de la economía libre de mercado. En Tarija y en Potsdam, en Buenos Aires y en Munich, en todo el mundo. Con los años me he dado cuenta de que -más allá de los muertos y que conste que no justifico las dictaduras de ninguna manera- aquí hago referencia al texto de Agustín Calcagno, eso es lo que ha cambiado nuestras vidas. La inyección de capital hizo que nuestros padres perdieran el rumbo, les impidió darse cuenta de lo que estaba pasando y sobre todo les quitó la ilusión de creer que podía ocurrir de una manera distinta al sueño americano, que es de consumo, de pobre a millonario si uno es listo. Seguramente también aplicable a la manera en la que se llevó a cabo la Reunificación Alemana, un ejemplo concreto, que tiene como consecuencia que aquí tampoco ya nadie sepa a ciencia cierta que significa ser socialdemócrata o democristiano o verde o amarillo y Berlín como todas las ciudades antes de las elecciones se parece a Las Vegas. Las deciciones importantes son económicas, están globalizadas, se lleban a cabo en un inglés chapurrero y ahora necesitan a otro enemigo.

Cuando me despierto de malhumor pienso exactamente igual que Jo Schneider en su último artículo, sólo que mi casa está muy lejos y me consuelo creyendo que ese es un pensamiento recurrente de la clase media a nivel global. Particularmente los giros en el pulso de la nación, en la idiosincrasia alemana, desde 1997, me han ido llevando a un estatus que, a día de hoy se denomina „ciudadano extra comunitario“. Como prácticamente todos mis conciudadanos, es igual cuál sea su estatus legal, he perdido muchos derechos civiles en los últimos años y mi pregunta es ¿qué papel juega en eso la Reunificación?

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No-lugares y lo nuevo de Alemania http://superdemokraticos.com/es/themen/burger/nicht-orte-und-neues-aus-deutschland/ http://superdemokraticos.com/es/themen/burger/nicht-orte-und-neues-aus-deutschland/#comments Mon, 23 Aug 2010 15:34:08 +0000 http://superdemokraticos.com/?p=901

Ultimamente mis amigos en Argentina me preguntan, con sonrisa pícara: „¿Que onda, que está pasando en Alemania? ¿Se están convirtiendo en una república bananera?“ Este repentino interés es algo nuevo. En los último años aquí nadie se había interesado demasiado por los problemas internos alemanes (y no había porque hacerlo). Cuando llegaron los reportes sobre la crisis económica en Alemania: A) no fueron tomados en serio o B) fueron objeto de mofa („bueno, ya ven, ¡así se siente una crisis!“). Tampoco me excluyo. Demasiadas veces tuve que escuchar observaciones arrogantes desde el norte, cuando informaba sobre Argentina, sobre todo luego de la crisis del 2001/02: „uh, todo lo que pasa por allá, en esos países, allá abajo“, siempre con el subtono de: a NOSOTROS no nos podría pasar algo igual.

Ahora de golpe los amigos recortan artículos de prensa sobre Alemania y me los traen. Un presidente renuncia ofendido. Un pulpo nos sirve de oráculo para predecir el futuro. El Euro está en peligro. Escándalos de corrupción en Ferrostaal y Siemens. Uno puede alquilar manifestantes y comprarse un carnet de conducir. La desgracia de la Loveparade en Duisburg (los organizadores se equivocaron en sus cálculos en un par de cientos de miles de participantes, hubo personas que fueron pisoteadas hasta la muerte). Alemania se robó el busto de la Nefertitis en Egipto y quiere quedarse con ella. Reactores nucleares con 30 años de antigüedad pueden seguir funcionando (a pesar de que probablemente el 98% de los alemanes se negaría a conducir un coche de la misma antigüedad porque no tiene Airbags).

Y bueno, ¿qué pasa en Alemania?“ Preguntan mis amigos o curiosos, y tengo que decepcionarlos. Alemania no será nunca una república bananera. Una república bananera está en el sur, llena de bellezas exóticas, un tanto corrupta y poco seria también. Alemania nunca estará en el sur y eso de ser exótico, no lo conseguiremos jamás.

¿Qué aspecto de mi vida es el determinante? Se me ocurren muchas respuestas, pero hay un aspecto común a todas: La ausencia. Como una ventanita pop-up, que uno puede cerrar rapidamente, aparezco en la vida de mis amigos en Alemania y en Argentina. ¿Cuándo estoy más de tres semanas en el mismo lugar? Volviendo a Buenos Aires después de hacer algún artículo en otro lado, muchas veces estoy – y no estoy. Me encierro a trabajar, hablo por teléfono. Soy tan libre como nunca lo hubiera imaginado. Y presa por esa ausencia que hace imposible lo que esencial en una vida: momentos compartidos con otros. Buenos y malos. La ausencia ha destruido amistades, un amor. Es una lamentación, que muchos no entienden, porque llevo una vida que a muchos les parece muy atractiva (la que yo también quería tener y muchas veces no puedo creer que sea mía). Pero olvidan que es un diseño de vida que sólo permite un tipo de par indivisible: Una persona y su laptop.

La ausencia me tiene en sus manos. Y esta falta de cotidianidad se concentra en no-lugares como por ejemplo los aeropuertos. Ahí me pongo en stand-by y dejo fluir los sentimientos que propician las inestabilidades en mi vida: la euforia y la melancolía.

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29 de Julio de 2010 – Una noche de verano con Los Superdemokraticos – Segundo Sommersalon http://superdemokraticos.com/es/editorial/zweiter-sommersalon-%e2%80%93-eine-sommernacht-mit-los-superdemokraticos/ Wed, 21 Jul 2010 17:04:41 +0000 http://superdemokraticos.com/?p=500 Improvisar, esa es quizá el mayor talento que tienen los latinoamericanos. Somos capaces de dar solución a los problemas, rebuscando entre las pocas opciones que nos da la realidad. Hacemos libros de cartón, teatros de botellas de plástico, nuestros mercados están llenos de juguetes y un sin número de utensilios hechos de cosas que en Alemania hace tiempo nadie más tendría en cuenta. Nuestras culturas no están subvencionadas, nosotros creamos nuestros propios espacios.

La gran mayoría de los artistas latinos saben que no tienen muchas opciones reales de vivir de su arte, pero igual… ahí esta la cultura latinoamericana, improvisadamente difundiéndose por el mundo, gracias al trabajo de la gente que se ha puesto a caminar.

En nuestro segundo Sommersalon queremos mostrar la iniciativa de una nueva generación de latinoamericanos en Berlín, que intenta dar su aporte estético a la ciudad. Ya sea luchando contra las inflexibles leyes de construcción que impiden que un lugar desangelado reciba color, ya sea re-visionando la música tradicional de un país, Cuba en este caso, ya sea innovando en los sabores de la cocina mexicana . El jueves 29 de julio a partir de las 21 hrs los invitamos a compartir con nosotros una noche de verano pensada especialmente para los sentidos, ahora que la ciudad está vacía. Los invitamos a venir a La Pulquería, el nuevo restaurant mexicano en la Spreewaldplatz.

Este mes nos acompaña el proyecto musical Ganga, una propuesta que fusiona ritmos tradicionales con elementos de latín jazz, raegge, pop y funk y sigue con la escuela de la Trova Cubana, reconstextualizándola tanto en la melodía como en los versos. Ganga es una propuesta de interpretación lírica muy singular. También contaremos con la presencia de DJ Roque Rodriguez (Colectivo Chupacabra, Chile / Funk, Soul, House), la compañía musical perfecta para bailar y dejarse llevar por la noche tibia de este Berlín sub tropical.

Donde: La Pulquería. Am Spreewaldplatz, Kreuzberg

A qué hora: 21 hrs.

Entrada libre

http://www.lapulqueria.de

www.superdemokraticos.com

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